lunes, 30 de abril de 2007

¡Tenía que contarlo!

Acabo de llegar de la calle. Iba por la gran vía escuchando música con el mp3 de camino a casa, absorta en mi mundo, viendo a la gente ir y venir, cuando una pareja que iba delante de mí ha empezado a ennerviarme porque cuando yo intentaba ir hacia la derecha, ellos (más bien ella) hacían lo mismo por delante de mí, y cuando yo lo intentaba por la irzquierda, lo mismo (esas casualidades odiosas que ocurren en calles muy transitadas). Así que al final me he quedado por detrás de ellos, y no sé por qué he empezado a mirarlos. Bueno, sí sé por qué. Creo que iban cogidos de la mano, pero en un momento en que mucha gente ha pasado a través de ellos han tenido que separarse y han estado un tiempo a unos dos metros de distancia. Y entonces me he dado cuenta: ella lo miraba a él, y él seguía andando. A veces se volvían a juntar, pero en seguida una masa de gente los volvía a separar (cruel destino :p), mientras se lanzaban miradas furtivas, nerviosas... hasta que, por fin, han conseguido andar a la par, uno al lado de otro. Esperaba que volvieran a darse la mano, pero no. Lo curioso es que ella hacía ademán de dársela, y él hacía cualquier gesto evasivo, y no se la daba (pobrecica, pensaba yo).
Pero luego la escena me ha parecido encantadora. Eran los típicos enamorados que están empezando y no saben como ir por la calle... en un determinado momento, ella, en un gesto "natural", le ha cogido del brazo, y ha seguido andando más relajada, pero no sé ni como, se han vuelto a separar (siempre ambos a una distancia de 10 cm a lo sumo). Se rozaban, pero no se tocaban. Sus manos se entrechocaban, pero ninguno tomaba la decisión. Yo estaba deseando decirle a él "¡Cogele ya la mano!" (pero, en fin, he preferido no hacerlo xD). Luego él, para mi sorpresa, se ha agarrado al brazo de ella con un gesto torpe (¡qué bonito!). A veces no hablaban, otras se reían o decían cualquier cosa trivial (a saber, yo no conseguía oir nada). Me pregunto si en algún momento han bromeado sobre su "juego de manos".
Ibamos ya cerca de Santa Isabel cuando él le ha pasado un brazo sobre los hombros, y estoy segurísima de que ella se ha sentido feliz. Luego ese brazo inquieto a vuelto a bajarse y a separarse de ella; más tarde la rozaba con gestos torpes y tensos, inquietos ambos... ¡con esa ingenua felicidad! y... ¡si! finalmente sus manos se han entralazado.. y antes de girar para ir a mi casa, me he quedado observándolos mientras se alejaban... y parece ser que el sello de sus manos era la situación más comoda para ambos, porque ya no se han despegado el uno del otro.

Y yo con una sonrisa de oreja a oreja. ¡Ha sido tan bonito! Me ha hecho mucha gracia ^^

No hay comentarios: