jueves, 10 de abril de 2008

Evidencias

Hay cosas en la vida que no pueden negarse:

No podemos negar -obviando comentarios sobre metafísica y filosóficos- que existe el día y la noche.
No podemos negar que cuando alguien dice no, su respuesta adquiere un significado negativo -independientemente de las ironías, mentiras y demás-.
Tampoco podemos negar, a veces, cosas tan evidentes y aplastantes que, por mucho que lo intentes, no puedes sacarle salidas por ningún lado.

¿Sabéis esas veces que tenéis algo muy claro, algo que no os gusta y sabéis que es así, pero aún dejáis cabida a una débil y pequeña esperanza que en el fondo deseáis y llegáis a creer que se hará realidad? Las ilusiones, supongo.

- Sabes muy bien que NO van a darte ese trabajo. Pero un poco antes de irte a dormir, piensas: ¿quién sabe?
- Te cuelas como una quinceañera de alguien que ni sabe que existes -lo que en el mundo real se llama imposible, sobre todo si no haces nada- y en tu mundo de la felicidad y la ensoñación SABES que los astros y la luna y los sistemas solares y todo lo que ande por el espacio se alinearán provocando el conjuro misterioso que hará que él te mire y, de pronto, así en un instante, se de cuenta de lo MARAVILLOSA QUE ERES.
Pues eso. No puede negarse que todas esas veces que nos dejamos llevar por los sueños imposibles vamos a terminar catapultados contra el suelo. Las excepciones al respecto son tan escasas que no voy ni a contarlas. Lo curioso es que, aunque lo sabemos, seguimos haciendo lo mismo. Y yo lo entiendo perfectamente. Porque es bonito poder soñar.


Pero.. ¿y si de pronto ya no puedes?.
Y si te llaman de ese trabajo y te dicen por teléfono: "Ey, despierta, tu curriculum es una puta mierda, tu no das ni de lejos la talla y no queremos verte ni en pintura. ¡Espabila! <- Serían unos cabrones xD
Y si el chico en cuestión te mira, se acerca a ti devorándote con esa penetrante mirada, está a un metro de distancia, piensas que estás en el cielo y de pronto, a sólo un centímetro de ti te dice: no te conozco de nada, pero deseo decirle a alguien de este mundo que.. ¡estoy enamorado! Y es ESA (señala a una rubia potente) la afortunada. <- Sería un cabrón xD

¿Por qué escribo sobre todo esto? Hombre, nadie me ha dicho que mi curriculum sea una mierda y aún tengo bases sólidas para pensar que puedo encontrar trabajo. Ningún tío inalcanzable me ha mandado a la mierda sin si quiera saber que existo...
Pero hay cosas que quiero y sé que ahora no las puedo tener. A todos nos pasa. A todos. Pero cuando tienes la certeza de un imposible, y es EVIDENTE que no va a cambiar nada... ¿qué siento? ¿impotencia? ¿tristeza?

Son muchas de las preguntas que pasan por mi cabeza.

Algo así como: y qué hago yo ahora...




5 comentarios:

Admin dijo...

Te recomiendo que dejes las drogas por un tiempo, no te están sentando muy bien que digamos... xDDD

Anda, deja de pensar así y vete a la cama.

Shinobu dijo...

Pensar o darle vueltas a la cabeza no es producto de drogarse.. al menos no siempre xD

P.D: lo del curriculum es mi más sincero y oculto temor -_-

Cucaracha dijo...

No deberías comerte tanto la cabeza con eso, podrías enfocarlo desde otro punto de vista. Por ejemplo, encontrar trabajo nada más empezar a buscar, es más bien difícil, sigue intentándolo y verás como algo encuentras, porque haber trabajo, haylo (y mucho).
Y respecto a lo otro, intenta verlo igualmente desde una perspectiva más positiva, a lo mejor es, como bien dices, un capricho de adolescente nada más y lo que realmente pasa es que todavía no has encontrado a la persona adecuada; o quizá sí, pero no te has dado cuenta aún de que lo es.
No sé, ver las cosas así es lo que me levanta la moral y me ayuda a decidir cuando estoy decaído o preocupado por algo, así que a ver si a ti también te surte efecto. ;-)

Ale, un saludo y
Ganbare Masho!!

Shinobu dijo...

Gracias por los consejos.
Lo del trabajo lo sé, es cuetión de tiempo y de empeño.
En cuanto a lo otro, no es el hecho de encontrar a "ese alguien" lo que me afecta, sino otro tipo de carencia. La verdad es que a día de hoy no hay nadie en concreto, así que no puedo comerme la cabeza demasiado en ese aspecto.
No sé exactamente cómo definirlo. Tampoco quiero concretar. Quiero decir, el hecho de que haya puesto el ejemplo de la quinceañera no quiere decir que me esté refiriendo a eso exactamente, sino a las ilusiones en general. Siempre me he dejado llevar por ellas, y me encantaba. Ahora también lo hago de vez en cuando, pero prefiero tantear primero el terreno.

Bueno, son sólo cosas que se me ocurren y en las que pienso cuando se acerca la hora de dormir :)

Alex de Leyenda dijo...

Como entrada me ha gustado mucho.

Ánimo Lara!